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13 oct 2013

“Las ART son una de las grandes responsables de la litigiosidad”

GONZÁLEZ GAVIOLA, TITULAR DE LA SRT. EL ORGANISMO FIJARÁ LAS ALÍCUOTAS QUE LAS ART COBRAN A LAS EMPRESAS. CÓRDOBA PAGA ALÍCUOTAS MÁS ALTAS. ABRIRÁN UNA MATRIZ ÚNICA PARA REGISTRAR NIVELES DE SEGURIDAD.
Buena relación. El funcionario nacional asegura que la SRT mantiene buen diálogo con la Provincia (La Voz / Raimundo Viñuelas).
FRONTAL COMO SIEMPRE, EL TITULAR DE LA SUPERINTENDENCIA DE RIESGO DEL TRABAJO (SRT) DE LA NACIÓN, JUAN GONZÁLEZ GAVIOLA, AFIRMA QUE LAS ASEGURADORAS DE RIESGO DEL TRABAJO (ART) SON UNA DE LAS GRANDES RESPONSABLES DE LA MAYOR LITIGIOSIDAD, AL CONVALIDAR JUICIOS SIN REVISAR LA VALIDEZ DEL RECLAMO.
TAMBIÉN ADELANTÓ QUE CARGARÁN EN UNA “MATRIZ DIGITAL ÚNICA” EL HISTORIAL DE INCIDENTES (SITUACIONES QUE NO AFECTAN AL TRABAJADOR) Y ACCIDENTES (QUE SÍ LO AFECTAN) DE UNA EMPRESA Y QUE FIJARÁN TARIFAS A LAS ART.
EL FUNCIONARIO VISITÓ CÓRDOBA EL ÚLTIMO VIERNES PARA MANTENER REUNIONES CON EL SECTOR PRIVADO Y CON EL MINISTERIO DE TRABAJO DE CÓRDOBA, CON QUIEN ASEGURA MANTIENE BUENA RELACIÓN.
–A CASI UN AÑO DE APROBADA LA LEY 26.773, ¿QUÉ BALANCE HACE?
–LO IMPORTANTE ES QUE LOS ÍNDICES MEJORARON SUSTANCIALMENTE. ESTE AÑO BAJÓ 25 POR CIENTO LA MORTALIDAD EN EL TRABAJO. LOS MONTOS DE REPARACIÓN DE LOS DAÑOS SE MULTIPLICARON POR CINCO DESDE 2009 Y EL SISTEMA ESTÁ ENTRE LOS MÁS GENEROSOS DEL MUNDO...
–PERO LAS ART SE QUEJAN PORQUE LA LITIGIOSIDAD SUBIÓ 25 POR CIENTO.
–ESTO TIENE MUCHAS ARISTAS. LAS ART SON UNA DE LAS GRANDES RESPONSABLES DE LA MAYOR LITIGIOSIDAD. ESTO SE DEMOSTRÓ, PRECISAMENTE, ACÁ EN CÓRDOBA. ENTRE 2006 Y 2009, LAS ART FACILITARON JUICIOS, AL CONVALIDAR ENFERMEDADES QUE NO EXISTÍAN EN EL BAREMO (TABLA DE CÁLCULO DE INCAPACIDAD SEGÚN LA ENFERMEDAD). TAMBIÉN SUCEDIÓ EN MENDOZA: UNA CÁMARA RECIBIÓ 300 CASOS, 85 POR CIENTO TENÍA CERO POR CIENTO DE INCAPACIDAD. ESTO NO LO DIJO LA COMISIÓN MÉDICA NI EL CUERPO FORENSE DE ESA PROVINCIA, LO QUE TERMINÓ DANDO INICIO UNA CAUSA PENAL SIMILAR A LA REALIZADA EN CÓRDOBA.
–¿POR QUÉ SUCEDE ESTO?
–HAY MUCHOS JUICIOS INVENTADOS. SE HIZO UNA AUDITORÍA Y LA CALIDAD DE LA DEFENSA DE LAS ART EN LOS JUICIOS NO NOS CONFORMA. EN LUGAR DE EXIGIR A LA JUSTICIA QUE SE CUMPLA EL BAREMO, SE ACEPTA EL JUICIO Y LE TRASLADAN ESE COSTO AL EMPLEADOR SUBIENDO LA ALÍCUOTA. EN DÍAS MÁS, LA SRT IMPLEMENTARÁ UN SISTEMA QUE NOTIFICARÁ POR VENTANILLA ELECTRÓNICA A LOS EMPLEADORES CUANDO SE INICIE ALGÚN JUICIO CONTRA ELLAS, QUE HOY SON JUICIOS CONTRA LA ART, PERO QUE DESPUÉS SE TRASLADA A LA ALÍCUOTA O PUEDEN IR EN SU CONTRA EN UN JUICIO CIVIL. EN CÓRDOBA SE DIERON MUCHOS CASOS DE ESTE TIPO EN LA INDUSTRIA CÁRNICA.
–¿QUÉ SUCEDIÓ?
–LAS ART LE QUERÍAN APLICAR TASAS DE 40 POR CIENTO SOBRE LA MASA SALARIAL, LO QUE LA DEJABA SIN COMPETITIVIDAD. LA SRT INTERVINO PARA BAJAR A CIFRAS RAZONABLES. DE HECHO, EN CÓRDOBA LAS ALÍCUOTAS SON 35 POR CIENTO MÁS CARAS QUE EN EL PAÍS. HOY EL SISTEMA DE RIESGO DEL TRABAJO ES MÁS UN SISTEMA DE RIESGO JUDICIAL. HAY ART QUE COBRAN MUCHO Y DAN MALAS PRESTACIONES; ESTAMOS ANALIZANDO EL POSIBLE CIERRE DE ALGUNAS POR LA CANTIDAD DE DENUNCIAS EN SU CONTRA. SE PIERDE MUCHA PLATA EN JUICIOS Y EN GESTIONES MÉDICAS INNECESARIAS.
–¿CÓMO PIENSAN CONTROLAR A LAS ART?
–VAMOS A IMPLEMENTAR UN RÉGIMEN DE ALÍCUOTAS, QUE IMPIDA PASAR AL EMPLEADOR EL DÉFICIT DE GESTIÓN JUDICIAL O MÉDICA. LA IDEA ES PONER ALÍCUOTAS FIJAS, COMO EN CHILE Y COLOMBIA, CON UN SCORING (PUNTAJE) EN FUNCIÓN DE LA CONDUCTA DEL EMPLEADOR, SEGÚN UN REGISTRO DE SINIESTRALIDAD Y EL ESTADO DE MAPA DE RIESGO, QUE MIDE EL RIESGO POTENCIAL.
–¿CÓMO LO IMPLEMENTARÁN?
–TRABAJAMOS EN ESTO DESDE HACE CUATRO AÑOS. AHORA, SE IMPLEMENTARÁ UNA MATRIZ DIGITAL ÚNICA EN INTERNET. ALLÍ SE CARGARÁN LOS INCIDENTES Y ACCIDENTES, LOS INFORMES DE LOS COMITÉS MIXTOS (DE EMPLEADOR Y TRABAJADORES) Y DE LOS INSPECTORES DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y DE LA SRT. ESTARÁ LISTA A FIN DE AÑO.
–PERO PARA ESTO HAY QUE AUMENTAR LAS INSPECCIONES...
–YA SE HAN AUMENTADO. MEDIANTE LOS CONVENIOS CON LA PROVINCIA Y RECURSOS QUE LE PROVEEMOS, SE HACEN EN CÓRDOBA ENTRE 700 Y 750 INSPECCIONES POR MES. ADEMÁS, EN EL PAÍS HAY 1.600 PREVENTORES DE ART, ESPECIALISTAS EN HIGIENE Y SEGURIDAD DE LAS ART CUYA OBLIGACIÓN ES RECORRER LAS EMPRESAS, ASESORARLAS Y, SI LAS COSAS NO SE HACEN BIEN, DENUNCIARLA A LA SRT. EN EL PAÍS SE HICIERON EL AÑO PASADO 1,5 MILLÓN DE DENUNCIAS, 150 MIL SON DE CÓRDOBA. ESA DENUNCIA SE TRANSFORMA EN UNA INTIMACIÓN POR PARTE DE LA PROVINCIA; ESTO BAJÓ LA MORTALIDAD ESTE AÑO.

Riesgos del trabajo, en el banquillo


Implementar la nueva ley de Riesgos del Trabajo llevó varios años. Se esperaba desde 2004, cuando comenzaron los primeros fallos de la Corte Suprema declarando la inconstitucionalidad de la ley de 1996. Sin embargo, al cumplirse este mes un año de la vigencia de la nueva norma son más las críticas que los apoyos que recibe. 
Los distintos actores del sector tienen diferentes visiones sobre el nuevo cuerpo legal pero, lo cierto es que, a pesar de que se amplió la cobertura, se aceleraron los pagos, se incrementaron los montos indemnizatorios (lo cual también implicó un mayor costo para las empresas) y se eliminó la denominada doble vía, la litigiosidad (uno de los problemas que se quería evitar con estas dos leyes) aumentó.
La ley de Riesgos del Trabajo (la flamante 26.773, y la anterior 24.557) apunta a crear, por una parte, un sistema de prevención de accidentes y enfermedades laborales, y un régimen de reparación cuando esas situaciones ocurren (aun aquellas que suceden en el trayecto entre la casa y el trabajo, denominado in itinere ). Esta reparación incluye prestaciones en especie (asistencia médica) y en dinero (indemnización ante una incapacidad, por ejemplo).
El sistema funciona a partir de la contratación por parte de las empresas o empleadores de un seguro que cubra estas contingencias. Puede ser a través de una Aseguradora de Riesgos del Trabajo (ART) o mediante el autoseguro (utilizado, en mayor medida, por entes públicos o grandes empresas).
A su vez, la ART tiene que controlar que las empresas pongan en marcha acciones de seguridad e higiene para prevenir accidentes.
Contrapuntos
Desde la Unión de ART, que reúne a estas entidades, se destaca que la cobertura del sistema está en un máximo histórico: en el país hay más de nueve millones de trabajadores y más de 900 mil empresas aseguradas.
Además, marca una reducción sustancial del índice de fallecidos que, según las estimaciones preliminares de la Uart supera el 15 por ciento en el primer semestre de 2013, aunque la Superintendencia de Riesgos del Trabajo (SRT) sostiene que cayó 25 por ciento. En 2012, hubo 112,7 muertes cada millón de trabajadores cubiertos; sin contar los accidentes in itinere el indicador baja a 64,9.
Desde la Asociación de Productores de Seguros de Córdoba, Daniel Layus, acota que hubo un incremento de los accidentes laborales in itinere , por la mayor utilización de motos.
Jorge Sappia, abogado laboralista y exsecretario de Trabajo de la Nación opina que la nueva ley “fue mal concebida y peor escrita” porque “ha dejado una cantidad de dudas que se resolvieron encareciendo el costo de reparación”.
“Falta un adecuado mecanismo de prevención del riesgo laboral. Se sacó a este tema del ámbito de la seguridad social y se lo llevó al derecho comercial. La ley no advirtió que se debía distinguir entre el empleador que cumple y el que no; se debería haber premiado a quien ejecuta planes de prevención”, agrega Sappia.
Layus opina que luego de la ley, y como consecuencia de la crisis, entre las ART hubo una competencia por tarifas que se tradujo en menores exigencias a los empleadores desde algunas aseguradoras no líderes, lo cual deriva en mayores siniestros. Desde la Uart, por el contrario, sostienen que la supervisión de las ART (por parte de la SRT y de la Superintendencia de Seguros de la Nación) es tal, que esto no se permite.
Motivos para reclamar
La instancia judicial se produce, básicamente porque el trabajador que sufre un siniestro no está conforme con el monto de la indemnización o porque no se le reconoce la enfermedad laboral o el porcentaje de incapacidad.
Con la nueva ley, se pretendía que, al incrementar los montos de las indemnizaciones y al definir las enfermedades en un listado, con una tabla (baremo) para calcular la incapacidad, los juicios iban a disminuir, cosa que no sucedió. Por el contrario, en 2013 se prevé un crecimiento de las acciones judiciales iniciadas del 25 por ciento respecto a 2012, un ritmo superior al aumento de años anteriores (ver gráfico).
En el promedio del país, hay 93 juicios iniciados cada 10 mil trabajadores cubiertos. Córdoba es la tercera provincia con la litigiosidad más alta, con 156 demandas.
Si bien se dejó de lado la doble vía (la posibilidad de cobrar la indemnización de la ART y, además, reclamar en la Justicia una reparación civil), el empleado puede optar. Aun cuando la mayor parte elige la reparación de la ART, los juicios siguen.
“Persiste el reclamo dirigido a las ART con el objetivo de lograr una mayor prestación aún. El papel de la Justicia es clave, cuanto más uniformes sean los criterios, menor será la incertidumbre y controversia, y menor la litigiosidad”, sostiene Mara Bettiol, presidenta de la Uart.
Carlos Casto, consejero del Grupo Sancor Seguros sostiene que así no se puede definir la cobertura que tienen que dar y se tienen que cobrar costos cada vez más altos.
Por su parte, el superintendente de Riesgos del Trabajo, Juan González Gaviola, fue muy duro con las ART (ver página 3 ). “Son unas de las grandes responsables del aumento de la litigiosidad. Se hizo una auditoría y la calidad de la defensa de las ART en los juicios no nos conforma. En lugar de exigir a la Justicia que se cumpla el baremo, se acepta el juicio y le trasladan ese costo al empleador subiendo la alícuota a la empresa”, dice.
Agrega que hay ART que cobran mucho y dan malas prestaciones. “Estamos analizando el posible cierre de algunas por la cantidad de denuncias en su contra”, dice.
A un año de las modificaciones, la nueva norma no parece conformar a ninguna parte, sólo al Gobierno nacional. Las empresas pagan más, los trabajadores no reciben la cobertura pretendida pese a la suba de los montos y las aseguradoras se quejan de la judicialización. La reglamentación de la ley que prepara el Gobierno será clave para determinar si finalmente los trabajadores gozarán o no de más seguridad.
La nueva ley
Eliminación de la doble vía. La nueva ley, de octubre de 2012, permite al trabajador ejercer la opción entre recibir la prestación dineraria de la Aseguradora de Riesgos del Trabajo (ART) o reclamar en la justicia civil el resarcimiento por un accidente o enfermedad laboral. Las alternativas son excluyentes entre sí.
Indemnizaciones. Se elimina la renta periódica y se establece la modalidad de pago único. Se incrementaron (en promedio 40%) las prestaciones dinerarias: ligadas al salario, adicionales y pisos prestacionales. Se incorpora la prestación adicional del 20% para cubrir otros daños (reparación integral, incluye el “daño moral”). Se pagan a los 15 días.
Actualización. Los pisos de las prestaciones dinerarias y los adicionales se actualizan en forma semestral por el Ripte (“Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables”).
Cobertura. Se actualizaron las enfermedades cubiertas por el sistema de riesgos del trabajo con un listado. Se implementó el baremo (tabla de cálculo). Se mantiene la diferenciación de los accidentes “in itinere” (en el camino al trabajo).
Comisiones. Se puso un límite a las comisiones de los intermediarios (productores de seguros). 
Alícuotas. Se implementa un mayor control por parte de la Superintendencia de Riesgos del Trabajo (SRT) y la Superintendencia de Seguros de la Nación (SSN). 
28. Son las ART en el país. Dan cobertura a unos nueve millones de trabajadores. Las ocho más grandes concentran más del 75%. 
3,12%. Es la cuota promedio (junio de 2013) como porcentaje de los salarios brutos que pagan las empresas. En Córdoba, sube a 4,24%.

26 jul 2013

Un obrero murió al ser aplastado por un camión en Río Cuarto

El hombre estaba trabajando en una obra aparentemente de desagüe, en ruta A005.

Un obrero que trabajaba al parecer en una obra de desagüe en la ruta A005 murió al ser aplastado por un camión volcador con cemento, en jurisdicción de Río Cuarto, confirmó un vocero policial.
En diálogo con La Voz, la fuente consultada indicó que alrededor de las 17 el obrero se encontraba trabajando en una fosa, al parecer, en una obra de desagüe.
A la altura del kilómetro 604, de la ruta A005, el hombre, que aparentemente era el chofer del vehículo, se bajó y fue arrastrado por el camión, fue aplastado.
Hasta el momento no se conoce la identidad y la edad del hombre, agregó la fuente.

15 jun 2013

Accidentes de tránsito y cultura de riesgo

No hay datos sobre lesionados graves con secuelas discapacitantes.

Accidentes de tránsito y cultura de riesgo

La Voz del Interior lleva una estadística con el número de muertos por accidentes de tránsito que tiene nivel de catástrofe permanente. Sin embargo, no existen datos sobre la cantidad de lesionados graves con secuelas discapacitantes, con un costo humano y económico difícil de medir. Son situaciones dramáticas, verdaderos quiebres biográficos. Y podemos afirmar que todo lo hecho al respecto en políticas de seguridad vial no ha cambiado las cosas significativamente. Tal vez sea importante rotar el ángulo de análisis.
Como en todos los problemas, hay que aceptar también en accidentes de tránsito una multicausalidad. Nada es tan sencillo como esperamos que sea y menos en conductas humanas, donde pondremos el acento.
El abordaje básico puede ser considerar que la persona al volante es la misma que vemos funcionar en su ámbito familiar, social y laboral, con los mismos sesgos de comportamiento que definen su personalidad. Mostrará mayor o menor grado de responsabilidad, de sentimientos de solidaridad y empatía con el prójimo.
Es posible definir conductas medias que van a favor de un cierto equilibrio social, digamos que están “en rango”. Y otros comportamientos que son disfuncionales. Consideremos por ejemplo una persona que no tolera frustraciones, con respuestas inadecuadas o violentas en su medio, con relaciones difíciles. Este “fuera de rango” en su familia o su trabajo es el mismo que se sienta al volante de un auto. Y el auto es literalmente un poderoso amplificador de sus desajustes. No respetar el orden en una cola es conflictivo, pero no poder esperar el verde de un semáforo puede ser mortal. Sin embargo el disparador conductual es el mismo. Proponemos que los valores y conductas en el uso del vehículo son los principales generadores de accidentes.
La conducción de un vehículo es un comportamiento que se da en un espacio común que es la calle o la ruta. No es un acto individual, privado. Cómo tengamos incorporado el sentimiento de pertenencia a la comunidad y la necesidad de valores éticos en la interacción con los demás es un aspecto fundamental. Cuidarme yo y cuidar al otro, cuidar la vida en un marco de responsabilidad social, empatía y solidaridad. Guio un dispositivo mecánico de centenares de kilos a gran velocidad en un ajustado equilibrio con otras personas con las que comparto una vía común, porque necesito desplazarme. Asumo que es una situación de riesgo dinámico, pero sé que hay normas para que sea el menor posible. Puedo seguirlas o no.
Nuestro contexto cultural y la forma en que interactúa con nosotros determina en gran parte nuestro comportamiento. La modalidad de relación que tengamos con nuestro automóvil, además de nuestra personalidad de base, estará sesgada por la presión cultural social.
Un vehículo –auto o moto– es, o debería ser, solo un instrumento mecánico, algo que sirve para desplazarnos. Esa es la idea, austera, despojada. En cuanto el vehículo toma el valor de representación de nuestras potencialidades “heroicas” entramos en el cono de sombra.
Los argumentos publicitarios no son del tipo “usted viajará tranquilo y a bajo costo”, sino que jerarquizan el diseño, potencia, aceleración, velocidad, y por supuesto “la seguridad” con frenos exquisitos y air bags bien dispuestos.
Se construye una imagen del vehículo de confiabilidad, de seguridad y solidez, que no es real. Sentados dentro de un auto nos aislamos de la situación de riesgo potencial que asumimos. El interior parece un confortable nido mecánico. Calefacción, música, contactos mullidos. Es una ilusión. La realidad es que estamos proyectados con nuestra familia a 130 kilómetros por hora. Es la velocidad que tendríamos al caer desde un décimo piso.
Cada vez que nos subimos a un vehículo tenemos que tener presente que salimos de nuestro encuadre biológico funcional. O, al menos, nos ponemos en los límites. La capacidad de asimilación y control de toda la información sensorial visual, auditiva y de movimiento que requiere conducir a alta velocidad y nuestra posibilidad de generar respuestas adecuadas en rangos de tiempo mínimos, fracciones de segundo, pueden exceder la dotación de aptitudes de homo sapiens. Somos seres humanos. Pero hay, además, otros consensos que se suman.
Algunos ejemplos. Se promueve la adoración de las maravillas mecánicas con rituales como el rally. La fascinación de la gente no se queda seguramente en mirar, hay contagio. Véanse los anuncios y el “tráiler” de una película que se promueve en estos días que se llama “Rápido y furioso”, nada menos. Una película con un título como “moderado y contemplativo” suena como no viable en nuestro contexto cultural. Pero algo rápido y furioso viene con más riesgo de vida que algo moderado y contemplativo. Se anuncia en un artículo la tendencia actual a “tunear” automóviles para “potenciar sus motores” y darles “mayor velocidad final, aceleración, recupero y capacidad de reacción”. ¿Qué estilo de conducción se está proponiendo? Desde los jueguitos electrónicos, hasta las apelaciones publicitarias de diversidad de productos, se promueven conductas de riesgo como la velocidad ó acciones extremas. Una popular bebida se publicita asociada un evento mundial de automovilismo, lo que equivale a asociar alcohol y velocidad. Obviamente, no hay una intención de daño pero de hecho se está construyendo cultura social. ¿Qué orden de valores maneja un padre que le regala una moto a su hijo de 14 años?
Todo lo dicho pone el acento en el hombre, el conductor y los valores que deciden su conducta. Es la variable de más difícil control.
El otro abordaje tiene en cuenta al vehículo en sí, sobre el que opera gran parte de lo que se ve en materia de seguridad. El control técnico vehicular o si prende o no una bombita en un auto que es, por otra parte, perfectamente visualizable. Los problemas técnicos tal vez sean los que menos inciden en accidentes. Vemos circular actualmente un parque automotor muy “sano”.
Algunas ideas básicas pueden ser las siguientes.
–Limitar la consideración del vehículo (moto o auto) a su carácter de instrumento. No le busquemos componentes épicos al manejar.
–Desalentar cualquier otra valoración de propiedades que avancen sobre conductas de riesgo: velocidad muy especialmente, potencia, estatus, etc. Sería de interés, en especial ante la no lejana crisis en combustibles, que se estimule un comportamiento austero de la industria en cuanto a desarrollo de modelos más racionales en tamaño y potencia.
–Promover la idea de que cada vez que nos subimos a un auto o moto, todo el tiempo que viajemos, al margen de cualquier otra consideración, vivimos una situación de riesgo por exceder una “escala humana de funcionamiento”.
–Asumir que la ruta es un espacio común, no nuestra propiedad, en el que debemos tener un comportamiento equilibrado y solidario.
–Jerarquizar la vida sobre cualquier otra consideración al decidir cantidad de temas, como horarios de conducción, estados de ruta, límites de velocidad, etc. Cerrar una ruta en horarios de niebla o no llegar al cierre de un banco puede traerle problemas a alguien, pero va a estar vivo para rezongar.
–Acentuar el control sobre conductas de riesgo como pasos imprudentes, alta velocidad, alcohol o falta de respeto a la indicación de los semáforos.
–La mala noticia en todo esto es que no podemos esperar cambios significativos, si no es literalmente a través de la construcción de una sociedad mejor, que jerarquice la vida, la solidaridad, que proponga la diversidad cultural a la homogeneización, el bien común al individualismo.
Este es un trabajo de concientización para generaciones, empezando ya en una diversidad de campos como en educación y a través de todos los recursos masivos que hacen a la construcción de la cultura social.
*Director Médico de la Clínica Rita Bianchi (Tanti) Neurorehabilitación.
El texto original de este artículo fue publicado el jueves 13 de junio de 2013 en nuestra edición impresa. Ingrese a la edición digital para leerlo igual que en el papel.

1 jun 2013

Una escena con varios actores

Hay muchos aspectos por dilucidar todavía respecto a este “accidente” de la construcción en la planta de ladrillos cerámicos Palmar, que le costó la vida a un obrero.

Hay muchos aspectos por dilucidar todavía respecto a este “accidente” de la construcción en la planta de ladrillos cerámicos Palmar, que le costó la vida a un obrero.
Entre ellos, las causas del desplome de una gran estructura de mampostería sobre tres obreros indefensos, con medidas de seguridad individuales que quedan reducidas a un mínimo de efectividad ante semejante fenómeno. Queda totalmente relativizada la protección que puede brindar un casco, un chaleco o unos borceguíes.
Otro elemento a considerar tiene que ver con los responsables de estos trabajadores. Los actores presentes en el escenario de estas tareas pueden sintetizarse en tres empresas: el comitente, Palmar; la contratista principal, Bearzotti; y la subcontratista, Aliotti, para la que trabajaba el fallecido Barrera.
Pero, a su vez, queda por determinar si la víctima fatal estaba sindicalizada como obrero de la construcción y pertenecía a Uocra o estaba bajo el paraguas del gremio que agrupa a los trabajadores de Palmar, el sindicato de Ceramistas.
Seguramente, todos estos actores estarán el martes próximo, a las 9, en el Ministerio de Trabajo de la Provincia, en la audiencia de oficio para establecer qué fue lo que sucedió en Palmar y las responsabilidades que de este suceso se desprenden.
Un hecho similar
El 17 de agosto de 2012, un obrero de 61 años murió aplastado al caerse una viga de 28 mil kilogramos en la fábrica Astori Estructuras, en barrio Palmar, en el extremo este de la ciudad de Córdoba. Este establecimiento es colindante con el depósito de Palmar.
La Policía confirmó que el fallecido fue Hugo Colazo.
El texto original de este artículo fue publicado el sábado 01 de junio de 2013 en nuestra edición impresa. Ingrese a la edición digital para leerlo igual que en el papel.

 

La construcción ya se cobró tres víctimas

Un obrero falleció ayer mientras trabajaba en la planta de Palmar, en el extremo este de la ciudad de Córdoba. Se le cayó parte de un techo sobre las piernas. Además,otro operario resultó con heridas graves y estaba internado anoche en terapia intensiva.

Familiares de la víctima tuvieron que esperar bastante tiempo antes de que se les informara oficialmente sobre el deceso (Pedro Castillo/LaVoz).
Minutos antes del almuerzo, un reducido grupo de obreros que realizaba reparaciones en un depósito de la planta de Palmar apenas si alcanzó a darse cuenta de que parte del techo estaba desplomándose sobre ellos.
Uno de ellos soportó sobre sus piernas la caída de una de las dos vigas y falleció casi inmediatamente, mientras que otro recibió graves heridas y un tercero lesiones leves.
La víctima fatal se llamaba Iván Barrera, tenía 37 años y hacía tres meses que se desempeñaba en una empresa subcontratista de tareas de construcción en la fábrica de ladrillos cerámicos ubicada en barrio Palmar, en el extremo este de la ciudad de Córdoba.
Barrera es el tercer muerto en accidentes de la construcción en lo que va de 2013 en Córdoba, y el primero de este año en la Capital. Los otros dos pertenecen a Pilar y Carlos Paz.
En el siniestro de ayer, además resultó con heridas de consideración Héctor Peñaloza, de 32 años, quien permanece en estado reservado en el Sanatorio Allende de barrio Nueva Córdoba. El informe oficial de los médicos de ese centro de salud señaló que padece un cuadro de politrau­matismos y contusiones. Anoche estaba en cuidados intensivos, con pronóstico reservado.
Gran angustia. Horas de gran angustia vivieron los familiares de Barrera en el portón de acceso de la ­fábrica, sin que nadie los atendiera ni les brindara expli­caciones.
Rafael Lima, cuñado de la víctima y uno de los más indignados, se quejó porque nadie les dio noticia alguna y sólo obtuvieron una mínima precisión del fallecimiento por parte de un compañero de Barrera. “Nos contó que se volvió a buscar una grinfa (al galpón) y se le cayó el techo encima”, comentó.
Más tarde llegó la mujer de Barrera, quien en medio del llanto se quejó por la falta de precisiones. Cerca de las 15.30 la recibieron, le dieron oficialmente la noticia y la hicieron pasar a las oficinas para con­tenerla. Recién a las 16 se terminó con el relevamiento de Policía Judicial y una ambulancia particular retiró el cuerpo de Barrera.
Una “mulita”. Sobre las causas del accidente no fue sencillo obtener precisiones. Ni fuentes ni conclusiones se encontraban ayer en la planta de Palmar.
Tampoco el asesor de Seguridad e Higiene Laboral de la Unión Obrera de la Construcción (Uocra) local, Rafael Calama, quiso adelantar opinión, salvo que las medidas de seguridad individuales (casco, chalecos, botines y otras) resultan totalmente irrelevantes cuando se desploma una estructura semejante.
En el lugar circuló repetidamente una versión sobre la eventual causa del accidente: una “mulita” el jueves o ayer mismo embistió una columna del depósito, lo que generó el trabajo de los obreros para reparar la estructura del galpón. Cuando estaban en esa tarea, cedieron dos vigas preensambladas y cayó buena parte de la cubierta del galpón.

31 may 2013

Murió un operario al desplomarse un techo

El accidente ocurrió en una fábrica de ladrillos ubicada entre ruta 19 y Circunvalación. Hay otros dos operarios heridos, uno en grave estado.

FÁBRICA. (Archivo).

Un operario murió esta tarde al desplomarse un techo en una fábrica de ladrillos ubicada entre ruta 19 y Circunvalación, en Córdoba capital.
Por el accidente hay otros dos heridos, uno en gravísimo estado.
El accidente ocurrió esta tarde en la fábrica Palmar, ubicada en Pedro Astori sin número. Un techo enlozado de unos 30 metros de largo y 5 de ancho cayó sobre tres operarios, desde unos 15 metros de altura, según indicó el comisario inspector Ángel Costero.
El comisario dijo que el operario muerto trabajaba para una empresa subcontratista y estaba haciendo tareas en el lugar.
Otro trabajador fue trasladado en gravísimo estado hacia un sanatorio privado, mientras que un tercero sufrió escoriaciones.

23 abr 2013

Habría orinado sobre una caja de fusibles y sufrió quemaduras

La "fusiblera" que explotó estaba en una casa de la zona de Plaza España.

Un joven, de 18 años de edad y que descargaba mercadería en un local de McDonald´s de la zona de Plaza España, sufrió quemaduras al explotar una fusiblera de una vivienda colindante, aparentemente luego de que el joven orinara en el lugar.
El comisario inspector Fabián Chirichian señaló a La Voz que el muchacho tiene lesiones en la mano y el rostro, aunque no serían de gravedad, y fue trasladado hasta el Instituto del Quemado.
Chirichian precisó que la “fusiblera” de la trifásica está expuesta sobre el costado de un portón de una casona antigua que actualmente está desocupada, ubicada al lado del local comercial.
Además precisó que “no estaban puestos los fusibles” por lo que se investigan las causas que provocaron el “fogonazo”.
El chico cumple tareas para una empresa transportista, que a su vez es contratada por McDonald´s.
Algunas versiones señalaron que el joven habría orinado sobre la fusiblera.
“Es una caja de fusibles que tiene una tapa y de allí va a un medidor para el inmuble. Este inmueble no tiene servicio, no tiene medidor, no hay fusibles en esa caja, sí hay corriente. Según versiones de gente aledaña una persona ha orinado allí y recibió una descarga eléctrica”, indicó un operario de Epec a Canal Diez.
El director del Instituto del Quemado, Germán Llancamán, dijo que es "probable" que el chico haya orinado en el lugar.

 

17 abr 2013


Murió un obrero accidentado en una tolva

El hecho fue mientras trabajaba, a la altura del kilómetro 694 de la autopista Córdoba-Pilar.

Un obrero murió en la mañana del miércoles luego de que cayeran sobre él áridos de una tolva mientras trabajaba en la empresa Canteras Tigli, a la altura del kilómetro 694 de la autopista Córdoba-Pilar.
El comisario inspector Mariano Zárate indicó a La Voz que a las 8.45, un joven de 24 años estaba trabajando en la empresa, a altura de ese kilómetro de la autopista, cuando "por razones a establecer se desmorona donde estaban los áridos y lo tapan. Los áridos de una tolva se le vinieron encima".
El muchacho, oriundo de Monte Cristo, fue auxiliado por compañeros, tras lo cual llegó la Policía y un servicio de emergencias. El muchacho, cuya identidad el comisario dijo que no podía brindar por orden de la fiscalía que interviene en el caso, falleció.
Estos datos difieren de los que, más temprano, otro vocero policial había dicho que era que el hecho había ocurrido a las 9.25, en el kilómetro 695 y que el obrero había quedado "atrapado" en la tolva 

14 abr 2013


Murió obrero tras caer desde un tercer piso en Carlos Paz
14/04/2013 | 07:40 El episodio se registró en la intersección de General Paz y avenida Libertad de la villa serrana. La víctima fue identificada como Pedro Giménez, de 25 años, de nacionalidad boliviana.
Un albañil murió ayer, a causa de las heridas que sufrió, tras tropezar y caer desde el tercer piso de un edificio en construcción de Villa Carlos Paz.

El episodio se registró en la intersección de General Paz y avenida Libertad de la villa serrana.

La víctima fue identificada como Pedro Giménez, de 25 años, de nacionalidad boliviana.

Giménez fue trasladado al Sanatorio Allende de la ciudad de Córdoba, donde finalmente falleció.